Te lo explico: hay multiplicidad de ideas con respecto a qué es o puede ser, pero acá voy a hablar de dos visiones, a grosso modo, del Estado dentro de un sistema no anarquista. Es un post de un blog, no una ponencia teórica, así que discúlpeseme si hay simplificaciones.
Para alguna gente, el Estado somos todes; esto es, es una forma de organizarse que contiene a la totalidad de la población. Para quienes pensamos así, hablar de "el Estado" en tercera persona y como algo externo es un sinsentido. Quienes coincidimos (aunque sea en lo general) con esta idea vemos al Estado como un ecualizador de las diferencias creadas por el capitalismo en el que vivimos. El Estado, así, debería estar presente en cada lugar donde hay una necesidad o falencia creada de modo sistémico.
Para otra gente, el Estado es algo externo; una entidad de la que no forman parte, a la que no pertenecen y con la que no quieren tener nada que ver. Este grupo habla de "el Estado" como algo ajeno. Esa gente no cree que haya nada sistémico en las diferencias de clase, raza, identitarias o la que elijas. Estas son condiciones más o menos naturales de la existencia. El Estado debe, entonces, desistir de querer compensar diferencias y limitarse a ciertas funciones mínimas, que por supuesto incluyen el poder represivo sobre esa OTRA gente, la que vive las desigualdades del lado de abajo.
Desde ese punto de vista, cada vez que se ataca al Estado lo que se ataca es la capacidad de éste de trabajar para minimizar o eliminar desigualdades. En el mejor de los casos, porque se argumenta que la iniciativa privada lo hace más eficientemente. En el peor de los casos, porque lo que se busca es preservar el statu quo del que la gente que odia al Estado se beneficia.
Dicho de otra forma: en un país como la Argentina, quienes se benefician de un Estado grande y expandido son las clases bajas. Quienes quieren "achicar" el Estado, en nombre de eficiencias que nunca terminan siéndolo, son las clases dominantes. Porque el Estado gasta dinero, claro. Dinero que tiene que salir de algún bolsillo. Y las clases altas no hay nada que detesten más que poner plata "de ellos" para que se beneficien "lxs otrxs".
La clase media está en un lugar extraño: quiere la ayuda del Estado pero no quiere poner (demasiada) plata, aunque usufructa muchos de esos beneficios. Pero por cuestiones aspiracionales clasistas, de vez en cuando compra la idea de mierda de que hay que tener un Estado mínimo, o chico.
¿Por qué? Porque la clase media es una mierda. Y lo digo como parte de esa clase.